Cerveza de mantequilla [James]

Fred se aburría como los mejores. No había nada para hacer. Mientras bajaba de la lechucería, pidiendo sus habituales explosivos a Sortilegios Weasley, decidió ir a Hogsmeade a beber una cerveza de mantequilla. Pensó en pasar a buscar a James, pero luego se arrepintió, alegando mentalmente que seguramente se lo encontraría allí. Y es que los primos pensaban muy parecido en ese sentido.

Se escapó y, antes de lo que había previsto, se encontró en las calles de Hogsmeade. "Y no traje mucho dinero", pensó con frustración, pasando delante de Honeydukes.

Evitando mirar demasiado la vidriera de la dulcería, a sabiendas que si miraba demasiado no podría resistir la tentación de comprarse algo, se dirigió a las Tres Escobas, donde se sentó en su mesa habitual y pidió a Madam Rosmerta una cerveza de mantequilla.

Un par de minutos más tarde James entraba por la puerta principal, guardando una gran cantidad de dulces de Honeydukes en su túnica. Rosmerta lo miró con reproche.

-Tu deberías estar en la escuela!

-Pero tu me quieres y no dirás nada.

Dijo con una de sus encantadoras sonrisas y la mujer resopló para luego irse a prepararle una cerveza. James vio a su primo y se sentó junto a él.

-Hola amigo, supuse que te encontraría aquí tarde o temprano.